Después de contaros como nos llegó la inspiración para elegir la temática de nuestra boda, enseñaros nuestras invitaciones y meseros, solo nos queda ver el resto de cositas que preparamos para que la identidad de la boda fuera completa.
Cucuruchos de arroz: elaboramos unos cucuruchos para el arroz que se repartieron a la salida de la iglesia. Tanto la imagen como el tipo de papel y estilo se mantuvo en toda la papelería.
Libro de firmas: en el libro de firmas cada página llevaba nuestra imagen. Ubicamos el libro en una mesa tematizada durante el cocktail para que los invitados fueran dejándonos sus mensajes.
Personalizamos unos bolígrafos de lentejuelas con plumas para que los invitados fueran tomando contacto con el mundo de la revista.
Porta abanicos: como queríamos repartir abanicos en el cocktail, decidimos prepara un soporte para ubicar unos cestos donde irían los abanicos, por supuesto con un cartel de estilo cabaret, como toda la temática del evento.
Sitting o lista de invitados: desde que elegimos la temática, teníamos en mente una tela estampada que nos traía de cabeza: Toile de Jouy.
Se nos ocurrió utilizar esta tela para los sitting, combinándolo con papel vegetal para así poder escribir los nombres.
Agradecimientos y Minutas: las tarjetas de agradecimiento irían en el plato, junto con una piruleta. En Internet había numerosos ejemplos de frases, pero finalmente decidimos escribir una que realmente saliera de nosotros.
La minuta (menú) quisimos prepararla como un programa de cabaret. Para ello utilizamos la canción de la película Cabaret – Life is a Cabaret. En el programa los platos eran presentados como estrellas del espectáculo.
En algún momento pensamos que la gente no se iba a leer todo ese repertorio, pero nos sorprendimos gratamente.
Cesto emergencia baño señoras: para que las señoras pudieran retocarse, o por si sufrían algún imprevisto, preparamos un cesto con tiritas, horquillas, brillo labial, colonia, toallitas quitamanchas, lima de uñas, pañuelos de papel, imperdibles… todo ello con carteles que mantenían la identidad visual de la boda.
Hadas y caballeros: para los niños preparamos unos detalles 100% hand made, baritas mágicas y espadas para matar dragones (pensamos que alguno se podría abrir la cabeza con ellas, suerte que no ocurrió nada) de madera para que ellos se sintieran especiales.
Photocall: y por supuesto, en una boda con temática cabaret no podía faltar un photocall con boas y chisteras para que todo el mundo en el baile se sintiera como un personaje de revista. Preparamos bigotes y gafas y los chicos de Recuerda Fotos nos prestaron un Telón Rojo muy apropiado para la ocasión.
Se pueden personalizar millones de cosas en una celebración. Algunos pensaran que nadie se fija en si todo lleva un determinado color, si se rige por una misma temática, o si se han creado con mucho esmero cada uno de los detalles de la boda, pero no os engañéis… si las cosas se hacen con cariño, TODOS LO NOTAN.
Libro de firmas: en el libro de firmas cada página llevaba nuestra imagen. Ubicamos el libro en una mesa tematizada durante el cocktail para que los invitados fueran dejándonos sus mensajes.
Personalizamos unos bolígrafos de lentejuelas con plumas para que los invitados fueran tomando contacto con el mundo de la revista.
Sitting o lista de invitados: desde que elegimos la temática, teníamos en mente una tela estampada que nos traía de cabeza: Toile de Jouy.
Se nos ocurrió utilizar esta tela para los sitting, combinándolo con papel vegetal para así poder escribir los nombres.
En algún momento pensamos que la gente no se iba a leer todo ese repertorio, pero nos sorprendimos gratamente.
Hadas y caballeros: para los niños preparamos unos detalles 100% hand made, baritas mágicas y espadas para matar dragones (pensamos que alguno se podría abrir la cabeza con ellas, suerte que no ocurrió nada) de madera para que ellos se sintieran especiales.
Se pueden personalizar millones de cosas en una celebración. Algunos pensaran que nadie se fija en si todo lleva un determinado color, si se rige por una misma temática, o si se han creado con mucho esmero cada uno de los detalles de la boda, pero no os engañéis… si las cosas se hacen con cariño, TODOS LO NOTAN.
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